Dos jóvenes, entre ellos una chica de 15, ingresaron al salón donde se estaba realizando el festejo con una escopeta recortada calibre 16 y dispararon contra los concurrentes reiteradas veces, dejando un total de cuatro lesionados.
Una fiesta de cumpleaños de 15 terminó de manera sangrienta con cuatro heridos de bala –entre ellos la chica que cumplía años- y uno de arma blanca, y con un intento de linchamiento hacia los dos jóvenes agresores por parte de los invitados.
Si bien los motivos de la agresión eran hasta el momento materia de investigación para los efectivos de la comisaría 1ra de esta ciudad, trascendió que el enfrentamiento estaría vinculado a problemas de relaciones de los jóvenes que participaban del festejo, ya que se trata de vecinos de la misma cuadra, según informaron fuentes policiales.
De acuerdo con lo indicado, el hecho sucedió el domingo a las 4:00 de la madrugada en el salón comunitario del barrio Provincias Unidas, ubicado en la calle Alberti al 1700.
Allí, según lo indicado por el diario Río Negro, la familia Lobos festejaba el cumpleaños de su hija junto a 85 invitados, hasta que una adolescente de 15 años acompañada por un joven de 21 irrumpieron en la fiesta y desde la vereda dispararon contra los presentes.
Desde la Policía local se informó que entre los numerosos disparos que los jóvenes efectuaron con una escopeta calibre 16 recortada, dos fueron direccionados a los invitados que estaban en la vereda y terminaron hiriendo a la cumpleañera, a su hermano de 25 años, a su madre y a otra parienta.
La respuesta por parte de los invitados no se hizo esperar y de inmediato persiguieron a los agresores que se ocultaron en una vivienda ubicada a sólo 20 metros del salón comunitario y que pertenecería a un familiar de ellos.
Esa casa fue el foco de la ira de los invitados quienes arrojaron cientos de piedras durante cuatro horas haciendo del barrio un virtual "campo de batalla" y obligando a la intervención de tres móviles de la comisaría 1ra, uno de la Metropolitana y otro del destacamento Santa Genoveva.
Si bien en un principio se creyó que las lesiones recibidas por los participantes de la fiesta eran de gravedad, una vez trasladados al hospital Castro Rendón se confirmó que sólo se trató de lesiones menores fruto de los perdigones de la escopeta y de una lesión con arma blanca que no dañó ningún órgano.
Fuente policiales precisaron que la adolescente del cumpleaños recibió un impacto en una de sus manos, en tanto que su hermano recibió tres impacto de perdigones que le dieron en el rostro, el cuello y el tórax.
Ambos, al igual que el resto de los heridos, fueron dados de alta poco después, según lo señalado.
La Policía demoró a los agresores y se secuestraron varias armas, entre ellas la escopeta y un pistolón.
Una fiesta de cumpleaños de 15 terminó de manera sangrienta con cuatro heridos de bala –entre ellos la chica que cumplía años- y uno de arma blanca, y con un intento de linchamiento hacia los dos jóvenes agresores por parte de los invitados.
Si bien los motivos de la agresión eran hasta el momento materia de investigación para los efectivos de la comisaría 1ra de esta ciudad, trascendió que el enfrentamiento estaría vinculado a problemas de relaciones de los jóvenes que participaban del festejo, ya que se trata de vecinos de la misma cuadra, según informaron fuentes policiales.
De acuerdo con lo indicado, el hecho sucedió el domingo a las 4:00 de la madrugada en el salón comunitario del barrio Provincias Unidas, ubicado en la calle Alberti al 1700.
Allí, según lo indicado por el diario Río Negro, la familia Lobos festejaba el cumpleaños de su hija junto a 85 invitados, hasta que una adolescente de 15 años acompañada por un joven de 21 irrumpieron en la fiesta y desde la vereda dispararon contra los presentes.
Desde la Policía local se informó que entre los numerosos disparos que los jóvenes efectuaron con una escopeta calibre 16 recortada, dos fueron direccionados a los invitados que estaban en la vereda y terminaron hiriendo a la cumpleañera, a su hermano de 25 años, a su madre y a otra parienta.
La respuesta por parte de los invitados no se hizo esperar y de inmediato persiguieron a los agresores que se ocultaron en una vivienda ubicada a sólo 20 metros del salón comunitario y que pertenecería a un familiar de ellos.
Esa casa fue el foco de la ira de los invitados quienes arrojaron cientos de piedras durante cuatro horas haciendo del barrio un virtual "campo de batalla" y obligando a la intervención de tres móviles de la comisaría 1ra, uno de la Metropolitana y otro del destacamento Santa Genoveva.
Si bien en un principio se creyó que las lesiones recibidas por los participantes de la fiesta eran de gravedad, una vez trasladados al hospital Castro Rendón se confirmó que sólo se trató de lesiones menores fruto de los perdigones de la escopeta y de una lesión con arma blanca que no dañó ningún órgano.
Fuente policiales precisaron que la adolescente del cumpleaños recibió un impacto en una de sus manos, en tanto que su hermano recibió tres impacto de perdigones que le dieron en el rostro, el cuello y el tórax.
Ambos, al igual que el resto de los heridos, fueron dados de alta poco después, según lo señalado.
La Policía demoró a los agresores y se secuestraron varias armas, entre ellas la escopeta y un pistolón.
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